miércoles, 20 de septiembre de 2017

Los obispos españoles se vuelcan con el dolor del pueblo mexicano

La tragedia de México ha calado hondo en el corazón de toda la Iglesia. También, en la española, que ha movilizado a sus entidades sociales para colaborar, en lo posible, con las víctimas del terremoto. En cabeza, el presidente de la CEE, Ricardo Blázquez, quien ha escrito al presidente del Episcopado hermano, José Francisco Robles, transmitiendo su "dolor por la catástrofe ocurrida, y esperanza en la pronta restauración".
En la carta, el cardenal se encomienda a la Virgen de Guadalupe, a quien piden "el pronto restablecimiento de los heridos, el descanso eterno para los difuntos, y el consuelo para quienes han perdido familiares y amigos, así como sus bienes materiales. Que el misterio de Cristo, muerto y resucitado, les ilumine la oscuridad de este difícil momento".
Junto a Blázquez, otros obispos han mostrado, a través de las redes sociales, su pesar por la tragedia en el país hermano. Así, en su cuenta de Twitter, el obispo de Mondoñedo-Ferrol, Luis Ángel Heras, cmf, apuntó que "oramos por México en estos momentos difíciles tras el terremoto. Nos duele todo el daño sufrido y cada tragedia personal".
Por su parte, el cardenal de Madrid, Carlos Osoro, subrayó que "rezo por nuestros hermanos afectados por el terremoto y acompaño en su dolor a los familiares de los fallecidos y a todo el pueblo mexicano".
"Que la Virgen de Guadalupe consuele las lágrimas de quienes han sufrido el azote de la naturaleza. Rezamos por vosotros", añadió el obispo de Ávila, Jesús García Burillo, mientras que el arzobispo de Tarragona, Jaume Pujol,ofreció una oración "por los difuntos, familiares y amigos del terremoto de México. Que la Virgen de Guadalupe les consuele". Finalmente, el obispo de Albacete, Ciriaco Benavente, aseguró tener en "corazón y los labios al pueblo mejicano y les encomiendo a Ntra Sra de Guadalupe".
Mientra tanto, Cáritas Mexicana y la Unidad de Medio Ambiente, Gestión de Riesgo y Emergencia de Cáritas Latinoamericana y del Caribe se han movilizado para coordinar en el terreno las primeras acciones de respuesta a los damnificados por el fuerte terremoto de intensidad 7,1 que ayer golpeó los estados de Morelos, Puebla y México DF.
Hasta la capital mexicana se trasladó Wilfredo Cervantes, experto de Cáritas Honduras, quien ya se encontraba en el país para coordinar las repuestas de la red Cáritas al seísmo de hace dos semanas en Chiapas y Oaxaca, con objeto de valorar con el equipo local de Cáritas México la situación y las prioridades de los damnificados.
Los servicios públicos de emergencia están atendiendo a los afectados y movilizándose en las zonas de desastre. Las líneas de teléfono están saturadas, al igual que el tránsito viario. Mientras, continúan las alertas por las posibles réplicas y el estado precario de algunos edificios que puedan derrumbarse.
Cáritas Española ha transmitido ya a los responsables de Cáritas Mexicana su solidaridad ante este nuevo desastre natural y toda su disponibilidad para apoyar la respuesta a la emergencia en aquellas necesidades que se consideren prioritarias.

Jesús Bastante

Iván, alumno de 12 años, al cardenal Osoro: «¿Le ha hablado Dios alguna vez?»


Este miércoles, 20 de septiembre, por la mañana, el cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ha visitado el colegio diocesano San Jaime Apóstol, asentado en el distrito de Villaverde. El centro ofrece Educación Infantil, de 0 a 6 años, Educación Primaria y –desde este curso– Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO). Durante la jornada, el prelado ha recorrido las aulas, ha saludado a los profesores y ha mantenido un encuentro con los alumnos del centro educativo
Acompañado por el vicario general, Avelino Revilla, el vicario de la V, Juan Pedro Gutiérrez, y el párroco de San Jaime Apóstol y titular del centro, Francisco Mora, el arzobispo de Madrid ha comenzado la visita rezando a los pies del Santísimo, en la parroquia que sustenta cada una de las columnas del colegio.
«Yo quiero ser amigo vuestro»
Tras el encuentro con el Señor, ha comenzado a recorrer, clase por clase, las distintas aulas que conforman el centro. Los primeros afortunados han sido los alumnos de 5º de Primaria, que se encontraban en clase de Matemáticas. Estos, atentos a todas y cada una de las palabras del cardenal, le han enseñado el temario que estaban tratando. «Yo quiero ser amigo vuestro», ha destacado, antes de impartirles la bendición, para animarlos a «escuchar a Jesús» y a «estar ratos a solas con Él», porque «se ha querido quedar con nosotros en el misterio de la Eucaristía, aunque –como pasa con algunas asignaturas– muchas veces no lo entendamos».
Para Jesús «todos somos iguales», ha confesado, mientras David enumeraba, uno por uno, los números ordinales. «Jesús os quiere a todos por igual, al primero, al quinto, al noveno…» Y vosotros, ha preguntado, «¿seríais capaces de hacer eso con todos?». En medio de los números cardinales y ordinales, ha concluido antes de despedirse de ellos, «para Él todos somos los primeros».
La siguiente aula en recibir al prelado ha sido la de 6º que, en ese momento, se encontraba cursando Lengua y, en concreto, los signos de puntuación. «¿Qué es un acento?», les ha preguntado. Tras la respuesta de Daniela, ha destacado que «el acento es importante en la vida de uno», y «ponemos el acento en aquello que nos gusta más». Sin embargo, «si no pongo acento en lo que creo, en que la gente conozca a Jesús, no me creen». Por tanto, para un cristiano, ha aseverado, «es importantísimo el acento».
«Jesús nos pide que nos amemos»
Así, clase a clase y alumno a alumno, el arzobispo de Madrid ha ido conociendo las distintas sensibilidades que conforman el colegio San Jaime Apóstol. 1º, 2º, 3º, 4º de Primaria, las sílabas, las palabras agudas, llanas y esdrújulas, el diccionario, el idioma inglés, niños, bebés… Y así, un sinfín de detalles que ha hallado su culmen con los alumnos de 1º de ESO, que se encontraban en la clase de Tecnología. Y hablando de incógnitas y teoremas, ha señalado que «los problemas están para resolverse y, de varias soluciones, tenemos que elegir la mejor». «¿Y cuál es?», ha sonado de fondo. Ante la atención de los presentes, el cardenal ha respondido que «Jesús identificó el problema», y «Él da una solución: que nos amemos», y «yo cuento con vosotros para que hagamos juntos ese proyecto de Jesús».
ván, pensativo, desde la quinta fila, ha levantado la mano para poner en el corazón del prelado aquello que más le inquietaba: «¿A usted le ha hablado Dios alguna vez?». Ante la atenta mirada de los compañeros, el arzobispo ha contestado que a todos nos habla: «A veces a gritos, otras en lo más profundo de nuestro corazón y sin escuchar su palabra, pero siempre nos habla a todos». «¿Y eso cómo lo sabemos?», ha apuntado Camila. «Nos habla en su palabra y también a través de personas». De hecho, ha continuado, «ahora mismo me está hablando a través de ti». «¿Solo?», ha insistido Héctor. «Y por medio de un hombre tirado en la calle que nadie se acerca a él, también nos está hablando Dios», ha destacado.
Antes de la despedida, se ha acercado a los más pequeños, ha jugado, ha rezado y ha cantado con ellos, para concluir firmando ¬–con una dedicatoria– una fotografía que ha dejado patente cada uno de los gestos de esta singular visita.
Infomadrid/Carlos González

El Papa en la catequesis: “Educar a la esperanza”

Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!
La catequesis de hoy tiene por tema: “educar a la esperanza”. Y por esto yo la dirigiré directamente, con el “tú”, imaginando hablar como educador, como padre a un joven, o a alguna persona abierta a aprender.
Piensa, ahí donde Dios te ha sembrado, ¡espera! Siempre espera.
No te rindas a la noche: recuerda que el primer enemigo por derrotar no está fuera de ti: está dentro. Por lo tanto, no concedas espacio a los pensamientos amargos, oscuros, ¿no? Este mundo es el primer milagro que Dios ha hecho, ha puesto en nuestras manos la gracia de nuevos prodigios. Fe y esperanza caminan juntos. Cree en la existencia de las verdades más altas y más bellas. Confía en Dios Creador, en el Espíritu Santo que mueve todo hacia el bien, en el abrazo de Cristo que espera a todo hombre al final de su existencia; cree, Él te espera. El mundo camina gracias a la mirada de tantos hombres que han abierto brechas, que han construido puentes, que han soñado y creído; incluso cuando a su alrededor se oían palabras de burla.
No pensar jamás que la lucha que conduces aquí abajo sea del todo inútil. Al final de la existencia no nos espera el naufragio: en nosotros palpita una semilla de absoluto. Dios no defrauda: si ha puesto una esperanza en nuestros corazones, no la quiere truncar con continuas frustraciones. Todo nace para florecer en una eterna primavera. También Dios nos ha hecho para florecer. Recuerdo ese diálogo, cuando el roble pidió al almendro: “Háblame de Dios”. Y el almendro floreció.
¡Donde quiera que te encuentres, construye! ¡Si estas por los suelos, levántate! No permanezcas jamás caído, levántate, déjate ayudar para estar de pie. ¡Si estas sentado, ponte en camino! ¡Si el aburrimiento te paraliza, sácala con las obras de bien! Si te sientes vacío o desmoralizado, pide que el Espíritu Santo pueda nuevamente llenar tu nada.
Obra la paz en medio a los hombres, y no escuchar la voz de quien derrama odio y división. No escuchar estas voces. Los seres humanos, por cuanto sean diversos los unos de los otros, han sido creados para vivir juntos. En los contrastes, paciencia: un día descubrirás que cada uno es depositario de un fragmento de verdad.
Ama a las personas. Amalos uno a uno. Respeta el camino de todos, lineal o atormentado que sea, porque cada uno tiene una historia por narrar. También cada uno de nosotros tiene su propia historia por narrar. Todo niño que nace es la promesa de una vida que todavía una vez más se demuestra más fuerte que la muerte. Todo amor que surge es una potencia de transformación que anhela la felicidad.
Jesús nos ha entregado una luz que brilla en las tinieblas: defiéndela, protégela. Esta única luz es la riqueza más grande confiada a tu vida.
Y sobre todo, sueña. No tener miedo de soñar. ¡Sueña! Sueña con un mundo que todavía no se ve, pero que es cierto que llegará. La esperanza nos lleva a la existencia de una creación que se extiende hasta su cumplimiento definitivo, cuando Dios será todo en todos. Los hombres capaces de imaginación han regalado al hombre descubrimientos científicos y tecnológicos. Han atravesado los océanos y han pisado tierras que nadie había pisado jamás. Los hombres que han cultivado esperanza son también aquellos que han vencido la esclavitud, y traído mejores condiciones de vida sobre esta tierra. Piensen en estos hombres.
Se responsable de este mundo y de la vida de cada hombre. Porque toda injusticia contra un pobre es una herida abierta, y disminuye tu misma dignidad. La vida no cesa con tu existencia, y en este mundo vendrán otras generaciones que seguirán a la nuestra, y muchas otras todavía. Y cada día pide a Dios el don de la valentía. Recuérdate que Jesús ha vencido por nosotros al miedo. Él ha vencido al miedo. Nuestra enemiga más traicionera no puede nada contra la fe. Y cuando te encuentres atemorizado ante cualquier dificultad de la vida, recuérdate que tú no vives sólo por ti mismo. En el Bautismo tu vida ha sido ya sumergida en el misterio de la Trinidad y tú perteneces a Jesús. Y si un día te asustaras, o tú pensarás que el mal es demasiado grande para ser derrotado, piensa simplemente que Jesús vive en ti. Y es Él que, a través de ti, con su humildad quiere someter a todos los enemigos del hombre: el pecado, el odio, el crimen, la violencia, todos nuestros enemigos.
Ten siempre la valentía de la verdad, pero recuérdate: no eres superior a nadie. Recuérdate de esto, ¡eh! No eres superior a nadie. Si tú fueras el último en creer en la verdad, no rechaces por esto la compañía de los hombres. Incluso si tú vivieras en el silencio de una ermita, lleva en el corazón los sufrimientos de toda creatura. Eres cristiano; y en la oración todo devuelves a Dios.
Y cultiva ideales. Vive por alguna cosa que supera al hombre. Y si un día estos ideales te pidieran una cuenta salda por pagar, no dejes jamás de llevarlos en tu corazón. La fidelidad obtiene todo.
Si te equivocas, levántate: nada es más humano que cometer errores. Y esos mismos errores no deben de convertirse para ti en una prisión. No estés enjaulado en tus propios errores. El Hijo de Dios ha venido no por los sanos, sino por los enfermos: pues ha venido también por ti. Y si te equivocas incluso en el futuro, no temer, ¡levántate! ¿Sabes por qué? Porque Dios es tu amigo. Dios es tu amigo.
Si te afecta la amargura, cree firmemente en todas las personas que todavía obran por el bien: en su humildad está la semilla de un mundo nuevo. Frecuenta a las personas que han cuidado el corazón como aquel de un niño. Aprende de las maravillas, cultiva el asombro. Cultiva el asombro.
Vive, ama, sueña, cree. Y, con la gracia de Dios, no desesperarse jamás. Gracias.
(Traducción del italiano, Renato Martinez – Radio Vaticano)
(from Vatican Radio)

El Papa Francisco refunda el Instituto Juan Pablo II para la familia para relanzar Amoris Laetitia

"Relanzar la exhortación apostólica Amoris Laetitia". Éste es, según Vicenzo Paglia, el objetivo del motu proprio del Papa Francisco por el que se refunda el "Instituto Juan Pablo II para estudios sobre matrimonio y familia", transformándolo en "Instituto Pontificio". El propio Paglia será su canciller.
Un cambio profundo, que se inscribe dentro de la reforma de la Curia, y que mantendrá "una privilegiada relación" con la Congregación para la Educación Católica, con el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida y con la Pontificia Academia para la Vida.
En rueda de prensa, Paglia afirmó que Amoris Laetitia supone un cambio en la dinámica de la Iglesia, después de "dos sínodos: el del 2014 dedicado a "Los desafíos pastorales de la familia en el contexto de la evangelización" y el del 2015 sobre "La vocación y la misión de la familia en la Iglesia y en el mundo".
Por ello, como sostiene el Papa en el motu proprio, los dos sínodos y Amoris Laetitia "han llevado a la Iglesia a una renovada conciencia del Evangelio de la familia y los nuevos desafíos pastorales a los que la comunidad cristiana tiene que responder".
El remozado Instituto apostará, como la exhortación papal, por la "conversión pastoral" y la "transformación misionera de la Iglesia", para prestar "atención a las heridas de la humanidad", la formación académica y la reflexión sobre el matrimonio y la familia.
En la presentación del mismo, monseñor Paglia destacó que Francisco toma en primera persona la responsabilidad de reflexionar sobre la familia y el matrimonio, de manera que todo lo que produjo el Sínodo "encuentre también desde el punto de vista científico las debidas respuestas".
El gran canciller del Instituto precisó que "no se contempla ningún cambio de consultores o profesores universitarios" si bien "se invitarán a profesores para nuevos cursos". Y que fue instituida la cátedra ‘Gaudium et spes‘, "de dirección, que puede gestionar diversos recorridos flexibles". En este caso el punto de interés central, "es el diálogo entre la familia y la Iglesia".
Se profundizarán diversos temas "de manera que la Amoris Laetitia se vuelva un instrumento pastoral, al lado de las familias y también de las ‘familias heridas' para que todas puedan redescubrir la Iglesia". Pero también para "ayudar a los responsables pastorales para que se preparen desde el punto de vista científico. Todo esto significa un desafío enorme".
"La iglesia en salida comporta un Instituto en salida, la familia es una institución no solo católica. Por lo tanto estaremos en diálogo con quienes aman a la familia y a la familia humana", añadió el arzobispo italiano.
Jesús Bastante

Francisco en Sta. Marta: Compasión que se traduzca en obras


El papa Francisco en la misa que celebró hoy en la Casa Santa Marta, invitó a pedirle al Señor la gracia de la compasión al ver tanta gente que sufre, pero no de modo pasivo sino dándole la dignidad que Dios quiere para ellos.
Partiendo del Evangelio de hoy, en el que san Lucas narra la resurrección del hijo de la viuda de Naín por obra de Jesús, el Papa precisó que en el Antiguo Testamento, los más pobres eran las viudas, los huérfanos, los extranjeros y los forasteros.
Explicó así que “la compasión es un sentimiento que involucra, es un sentimiento del corazón, de las entrañas, afecta todo. No es lo mismo que tener pena, o… ‘¡qué lástima, pobre gente!’: no, no es lo mismo. La compasión compromete. Es ‘padecer con’. Esto es la compasión. El Señor se compromete con una viuda y con un huérfano… Pero dime, tú tienes a toda una muchedumbre aquí, ¿por qué no hablas a la gente? Deja… la vida es así… son tragedias que suceden, suceden…”.
“No, para Él era más importante aquella viuda y aquel huérfano muerto, que la muchedumbre a la que le estaba hablando y que lo seguía. ¿Por qué? Porque su corazón, sus vísceras se implicaron. El Señor, con su compasión, se ha interesado en este caso. Tuvo compasión”, dijo.
La compasión significa “acercarse y tocar la realidad. Tocar. No mirarla desde lejos. Tuvo compasión –primera palabra– se acercó, segunda palabra. Después hace el milagro y Jesús no dice: ‘Hasta la próxima, yo prosigo el camino’: no. Toma al muchacho y ¿qué dice? ‘Lo devolvió a su madre’: restituir, la tercera palabra. Jesús hace milagros para devolver, para colocar en su propio lugar a las personas. Y es esto lo que ha hecho con la redención. Tuvo compasión –Dios tuvo compasión– se acercó a nosotros en su Hijo, y nos restituyó a todos nosotros la dignidad de hijos de Dios. Nos ha recreado a todos”.
El Santo Padre exhortó por ello a “hacer lo mismo”, a seguir el ejemplo de Cristo, acercarse a los necesitados, “no ayudarlos desde lejos, porque hay quien está sucio, no se ducha o huele mal”.
“Muchas veces miramos los telediarios o la primera página de los periódicos, las tragedias… pero mira, en aquel país los niños no tienen qué comer; en aquel país los niños son soldados; en aquel país las mujeres son esclavizadas; en aquel país… oh, ¡cuántas calamidades! Pobre gente… Giro la página y paso a la novela, a la telenovela que viene después. Y esto no es cristiano”.
“Y la pregunta que yo haría ahora, mirándolos a todos, y también a mí mismo: “¿Soy capaz de tener compasión? ¿De rezar? Cuando veo estas cosas, que me las llevan a casa a través de los medios de comunicación… ¿mis entrañas se mueven? ¿Mi corazón padece con aquella gente, siento pena, digo ‘pobre gente’, y así?… Y si uno puede tener compasión, hay que pedir la gracia: ‘¡Señor, dame la gracia de la compasión!’”,
Invitó por ello con la oración de intercesión y con nuestro trabajo de cristianos, a ser capaces de ayudar a la gente que sufre, a que “sea restituida a la sociedad, a la vida de la familia, del trabajo, o sea a la vida cotidiana”.
(ZENIT – Ciudad del Vaticano, 19 Sept. 2017)

Terremoto en México: el Papa expresa su “cercanía y oración” por las víctimas


El papa Francisco ha recordado a las víctimas del terremoto en México esta mañana, en la Audiencia general celebrada en la plaza de San Pedro.
El Santo Padre ha dicho: “Ayer un terrible terremoto ha asolado México, vi que hay muchos mexicanos hoy entre ustedes. Causó numerosas víctimas y daños materiales. En este momento de dolor quiero manifestar mi cercanía y oración a toda la querida población mexicana”.
El Pontífice concluyó pidiendo a todos elevar “nuestra plegaria a Dios para que acoja en su seno a los que han perdido la vida, conforte a los heridos, sus familiares y a todos los damnificados. Pidamos también por todo el personal de servicio y de socorro que prestan su ayuda a todas las personas afectadas, y con nuestra Madre, la Virgen de Guadalupe, con mucha ternura, esté cerca de la querida nación mexicana”.
Las primeras noticias desde México indican que un fuerte sismo que ha sacudido con fuerza la capital del país y otros cuatro Estados, con un saldo provisorio de menos 216 muertos, entre ellos, más de 20 niños en una escuela.
ZENIT – 20 Sept. 2017

Un soldado de Boko Haram se arrepiente de sus crímenes contra los cristianos


Un antiguo yihadista en Nigeria ha confesado públicamente las atrocidades cometidas y ha pedido perdón
Bana Umar, de 30 años, es un antiguo miembro del grupo islamista armado Boko Haram, que aterroriza el norte de Nigeria y Camerún desde hace siete años. Umar se alistó hace tres años porque quería luchar junto a ellos y matar a «los infieles», es decir, a cristianos, entre otros.
Entonces un día, mientras escuchaba la BBC en la radio, este terrorista quedó conmocionado por el horror de las atrocidades que estaba cometiendo y decidió abandonar el grupo. Explicó su arrepentimiento en estos términos: «Me doy cuenta de que todo lo que hicimos fue el infierno, estábamos matando. Estábamos robando. Estábamos desposeyendo a las personas de sus bienes por motivo de la religión. Finalmente, me fui».
Las tragedias perpetradas por Boko Haram incluyen numerosos asesinatos que dejan atrás a viudas y huérfanos desvalidos y traumatizados. Desde abril de 2017, el grupo terrorista habría matado a más de 380 civiles, según un informe publicado por Amnistía Internacional, informa el sitio web de Africatime. UNICEF, por su parte, afirma que el grupo ha fomentado en el noreste de Nigeria cuatro veces más atentados suicidas con niños este año que en 2016.
El reto del perdón
El arrepentimiento de este exyihadista —y el de otros soldados antes que él— es un estímulo para la comunidad cristiana en todo el país, que ha sufrido durante décadas a causa de esta situación. Y tal vez sea el comienzo de un paso hacia el mayor desafío que está llamado a asumir: ¡el perdón! El Evangelio llama a “amar a sus enemigos” y a rezar por ellos.
Los cristianos son un objetivo principal de Boko Haram en Nigeria, particularmente en el Estado de Borno, donde los yihadistas secuestraron a 276 niñas de secundaria en la ciudad cristiana de Chibok en 2014. Un centenar de ellas fueron liberadas en 2016-2017. En los últimos seis años, los rebeldes de Boko Haram han atacado varias iglesias y lugares cristianos en el norte del país.
En general, la situación de los cristianos en Nigeria se está deteriorando. Recientemente, los obispos de la provincia eclesiástica de Kaduna lamentaron la actitud de indiferencia del gobierno federal. Según la Lista Mundial de la Persecución a cristianos elaborada por Puertas Abiertas, Nigeria se clasifica como el duodécimo país del mundo donde los cristianos son más perseguidos.
Aleteia

Rebeca, superviviente de Boko Haram: «He perdonado a los terroristas»


Rebeca Bitrus, cristiana y madre de familia cristiana de Maiduguri, al noreste de Nigeria, es un ejemplo de fortaleza y fe frente a los ataques del grupo yihadista Boko Haram. «Cuando gritaban Allahu akbar, yo rezaba en mi interior: Jesús sálvame», ha afirmado la mujer, secuestrada durante dos años por los terroristas. Perdió a un hijo a manos de los terroristas y quedó embarazada después de sufrir numerosas violaciones: «He perdonado a los terroristas».
Rebeca ha participado este martes en Madrid en la presentación de la campaña Libres ante el terror de la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN), para apoyar a las víctimas de Boko Haram en el norte de Nigeria. Junto a Rebeca, el padre Innocent Zambua, sacerdote de la diócesis de Maiduguri, ha señalado: «En nuestra diócesis hemos registrado unas 100.000 personas desplazadas, 300 iglesias quemadas, y 25 escuelas, tres centros de salud y tres conventos destruidos».
Por su parte, el director de ACN en España, Javier Menéndez Ros, ha destacado el papel fundamental de la Iglesia católica en las zonas que más han sufrido los ataques de Boko Haram: «Los obispos del norte de Nigeria están ayudando a todos, sin ellos la herida sería aún mayor». Menéndez Ros ha reafirmado el compromiso de ACN con los cristianos de Nigeria y víctimas del grupo terrorista: «Nigeria es el país más mortífero para los cristianos. No queremos dejarles solos».
Según el Instituto para la Economía y la Paz, Nigeria ocupa el tercer puesto en el ranking global de terrorismo. Boko Haram y los grupos de pastores fulani han dejado 20.000 muertos y miles de desplazados por la violencia en 2016, según datos del Banco Mundial.
Solo en la diócesis de Maiduguri, la Iglesia atienda a 5.000 viudas y 15.000 huérfanos víctimas de Boko Haram.  Ayuda a la Iglesia Necesitada ha contribuido con 1,5 millones de euros a paliar las necesidades de las personas que han sufrido la violencia terrorista en Nigeria en los últimos cinco años. Diócesis como las de Kaduna, Jos, Kafanchan o Maiduguri han recibido 556.950 euros para proyectos de construcción, 577.611 euros para el sostenimiento de sacerdotes, 234.910 euros para la formación y ayuda a seminaristas, 67.300 euros para la formación de catequistas y 11.400euros para la formación de novicias.
La campaña Libres ante el terror tiene como objetivo recaudar fondos para sostener a las viudas y huérfanos víctimas de Boko Haram en la diócesis de Maiduguri, para su escolarización y formación. También quiere reconstruir las casas de aldeas cristianas quemadas por el grupo fulani en el sur de Kaduna, entre otros proyectos relacionados con la formación de seminaristas, catequistas, y acciones a favor del diálogo interreligioso.
Alfa y Omega/ACN-España

20 de septiembre: mártires coreanos Andrés Kim y Pablo Chong


La Iglesia celebra en septiembre el mes de los mártires, con motivo de la fiesta, el 20 de septiembre, de san Andrés Kim Tae-gon y el resto de los 103 mártires asesinados, que dieron su vida entre 1839 y 1867. En una carta, el Papa ha pedido a los fieles coreanos que ésta sea «una oportunidad para comprometerse más plenamente en la urgente tarea de la evangelización». Para Francisco, la Iglesia coreana de aquellos años es un todo un modelo, ya que, pese a las persecuciones y tener que vivir durante décadas privados de pastores, los fieles cristianos mantuvieron viva la fe
Fueron laicos los primeros misioneros en Corea en el siglo XVIII, formados por los jesuitas en China. Cuando, a finales del siglo, el primer sacerdote logró entrar clandestinamente en la península, encontró a unos 4 mil católicos, catequizados, pero sin bautizar. La persecución multiplicó su número, y hoy Corea del Sur es el segundo país asiático con mayor presencia cristiana, después de Filipinas.
Las autoridades coreanas erigieron a mediados del siglo XIX un monumento celebrando «El aniquilamiento de la religión perversa de los cristiano». Murieron unos 8 mil fieles, pero su sangre dio fruto.
Los dos mártires más conocidos de aquellas primeras comunidades son san Andrés Kim Taegon, el primer sacerdote coreano, y el laico san Pablo Chong Hasang. Hijo de un mártir, Andrés se ordenó en China, y fue decapitado, tras ser descubierto intentando propagar la fe en Corea.
También Pablo Chong procedía de una familia que sufrió persecución. A los 20 años, se vio obligado a dejar a su familia para reorganizar la Iglesia en Seúl. Desde allí escribiría al Papa para pedirle misioneros. Fue así como Corea tuvo su primer obispo, monseñor Ímbert, que se alojó en su casa. La persecución arreció. El obispo pudo escapar, pero no así Pablo, a quien pronto seguirían en el martirio su madre y su hermana.
Juan Pablo II les canonizó, junto a otros 101 mártires, durante su viaje a Seúl, el 6 de mayo de 1984. «La Iglesia coreana es única porque fue fundada completamente por laicos», dijo el beato Papa Wojtyla. «Esta Iglesia incipiente, tan joven y sin embargo tan fuerte en la fe, soportó hola tras hola de feroz persecución, de manera que, en menos de un siglo, pudo enorgullecerse de tener 10 mil mártires. La muerte de estos mártires fue levadura de la Iglesia y llevó al espléndido florecimiento actual de la Iglesia coreana. Todavía hoy, el espíritu inmortal de los mártires sostiene a los cristianos de la Iglesia del silencio en el norte de esta tierra trágicamente dividida».
En abril, durante una homilía en la Casa de Santa Marta, el Papa Francisco aludió al caso análogo de Japón.
Durante las persecuciones del siglo XVII, los misioneros católicos fueron expulsados y las comunidades cristianas permanecieron 200 años sin sacerdotes. No obstante, cuando volvieron los misioneros a la isla, se encontraron una comunidad cristiana viva. «¿Quién hizo esto? ¡Los bautizados!», resaltó el Santo Padre.
Algo similar sucedió también en los primeros siglos del cristianismo. «Eran simples fieles, apenas bautizados desde hacía un año o poco más, quizá. Pero tenían el coraje de ir a anunciar. ¡Y les creían! ¡E incluso hacían milagros!»
Con su testimonio, «suscitaban curiosidad… Hemos conocido a Jesús», anunciaban. «Y nosotros, ¿creemos en esto?, se preguntó el Papa. «¿Que el Bautismo sea suficiente para evangelizar? O esperamos que el cura diga, que el obispo diga… ¿Y nosotros?» «Somos fieles al Espíritu para anunciar a Jesús con nuestra vida, con nuestro testimonio y con nuestras palabras?»
Ricardo Benjumea
Alfa y Omega

Los obispos agradecen las «cadenas de vida» formadas en México


Miles de manos han formado «cadenas de vida» durante toda la noche para rescatar a los damnificados del terremoto en México. Los obispos del país han agradecido la solidaridad al pueblo mexicano y se ponen en marcha para «coordinarnos y colaborar más»
«Una vez más estamos siendo testigos de la solidaridad del pueblo de Méxicoque ve en el que sufre a su hermanoMiles de manos han formado “cadenas de vida” para rescatar, alimentar o poner su granito de arena ante la emergencia». Es el agradecimiento de los obispos de la Conferencia Episcopal Mexicana, liderados por monseñor José Francisco Robles, que en un comunicado emitido la tarde del martes se unen «a la pena por las víctimas del seismo» e invitan «al Pueblo de Dios a unirse en solidaridad por nuestros hermanos, que están padeciendo los diferentes calamidades que han azotado nuestro país».
Los obispos, que piden el consuelo de la Virgen de Guadalupe «para que por su intercesión nos auxilie y nos fortalezca en la reconstrucción de nuestra patria», permanecen «atentos a la información que va surgiendo y buscando la manera de coordinarnos y colaborar más».
Según la Agencia de Protección Civil mexicana, al menos 217 personas han fallecido en diferentes zonas –86 de ellas en la capital, 71 en Morelos, 43 en Puebla, 12 en el Estado de México, cuatro en Guerrero y uno en Oaxaca–, aunque la cifra se incremente con el paso de las horas. El terremoto se ha producido el mismo día en el que se cumplían 32 años de la peor tragedia que ha vivido el país: el terremoto que causó cerca de 10.000 muertos en 1985.
Monseñor Oscar Campos, obispo de Tehuantepec, una de las regiones más afectadas, ha declarado que a pesar de que la situación actual los rebasa, continúan en su labor de acompañamiento con las familias afectadas para «animar a la esperanza y ser una Iglesia en salida». Junto con Cáritas México, la diócesis está repartiendo víveres, kits de aseo, toldos, lonas y baños ecológicos. El segundo paso será reconstruir las viviendas más dañadas. «Lo que nos toca, como Iglesia, es procurar que esta sociedad funcione de tal manera que, en ella y con ella, se pueda remediar o aliviar el sufrimiento lo más y lo mejor posible. Por esto, animamos a la población a organizarse solidariamente superando divisiones y a colaborar en su propia reconstrucción», concluye el prelado.
Alfa y Omega

EVANGELIO DE HOY: LOS SABIOS RECONOCEN A CRISTO


 


Lectura del santo evangelio según san Lucas (7,31-35):

En aquel tiempo, dijo el Señor: «¿A quién se parecen los hombres de esta generación? ¿A quién los compararemos? 

Se parecen a unos niños, sentados en la plaza, que gritan a otros: "Tocarnos la flauta y no bailáis, cantamos lamentaciones y no lloráis." 

Vino Juan el Bautista, que ni comía ni bebía, y dijisteis que tenla un demonio; viene el Hijo del hombre, que come y bebe, y decís: "Mirad qué comilón y qué borracho, amigo de publicanos y pecadores." 

Sin embargo, los discípulos de la sabiduría le han dado la razón.»

Palabra del Señor