Con diez preguntas en preparación a la
Pascua, el Papa Francisco y los miembros de la Curia
Romana se encuentran realizando los Ejercicios Espirituales,
del 6 al 11 de marzo, en la Casa del Divino Maestro de la
localidad Ariccia que comenzaron, la tarde del IV Domingo de
Cuaresma, con la Adoración Eucarística y el rezo de las Vísperas. El padre Ermes
Ronchi, de la Orden de los Siervos de María, dirige la meditación sobre
“las preguntas desnudas del Evangelio”.
La primera meditación de este retiro
espiritual, de la tarde del primer domingo de marzo fue sobre la pregunta de
Jesús: “¿Qué buscan?” (Jn 1, 38), según un pasaje del
Evangelio de Juan. Tal como afirmó el Padre servita, la propuesta para estos
días es detenerse en escucha ante las preguntas de Dios, no para interrogar al
Señor, sino para dejarse interrogar por Él. Y, en lugar de buscar
inmediatamente la respuesta, detenerse para vivir bien estas preguntas, “las
preguntas desnudas del Evangelio”. Y amar estas preguntas que ya son
revelación. Es más, las preguntas son el “otro nombre de la conversión”.
En su meditación de la tarde del 6 de
marzo el Padre Ronchi afirmó que Jesús educa en la fe a través de
preguntas más que a través de las palabras. Y de hecho, los cuatro Evangelio
ofrecen más de 220 preguntas del Señor. Porque la pregunta – dijo – es
una comunicación no violenta, que no hace callar al otro, sino que relanza el
diálogo, implicándolo y, al mismo tiempo, dejándolo libre. También explicó que
el mismo Jesús es una pregunta, puesto que su vida y su muerte nos interpelan
acerca del sentido último de las cosas y nos interrogan sobre lo que hace feliz
la vida siendo, precisamente Él, la respuesta.
El religioso también afirmó que la fe es
buscar a “un Dios sensible al corazón, uno que hace feliz el corazón, cuyo
nombre es alegría, libertad y plenitud. Y tras recordar que Dios es bello,
concepto que hay que anunciar dijo que tal vez el rostro de Dios haya sido
empobrecido porque a veces lo hemos reducido a la miseria, relegado a hurgar en
el pasado y en el pecado del hombre…
“Todo hombre – concluyó diciendo el Padre
Ermes Ronchi – busca a un Dios atrayente. Dios puede morir de aburrimiento en
nuestras iglesias. Devolvámosle su rostro solar, un Dios deseable del que
gustar y gozar. Será como beber de las fuentes de la luz, en las orillas del
infinito. ¿Qué buscan? ¿Por quién caminan? Busco a un Dios deseable – dijo –
camino por uno que hace feliz el corazón”.
Las reflexiones del primer lunes de marzo
se basan en las preguntas: “¿Por qué tienen miedo, no tienen fe?” (Mc, 4,
40), según el Evangelio de Marcos y “Ustedes son la sal de la tierra.
¿Pero si la sal pierde sabor, luego será salada con qué?” (Mt, 5,
13), según el Evangelio de Mateo.
Las del martes se basarán en las
preguntas: “Pero, ¿quién dicen que soy yo?” (Lc 9, 20); “Y volviéndose hacia la mujer, dijo a Simón: ¿ves a esta
mujer?” (Lc 7, 44), ambas basadas en el
Evangelio de Lucas.
Las reflexiones del miércoles se centrarán
en: “Jesús dijo a sus discípulos: ¿Cuántos panes tienen?” (Mc 6, 38; Mt 15, 34), tal como se lee en los
Evangelios de Marcos y Mateo y “Entonces Jesús se levantó y dijo: mujer, ¿dónde
están tus acusadores? ¿Alguien te ha condenado?” (Jn 8, 10), según se lee en el Evangelio de Juan.
El jueves 10 de marzo, en el quinto día de
Ejercicios Espirituales del Papa Francisco y la Curia Romana, basándose en el
Evangelio de San Juan, el predicador ofrecerá sus meditaciones sobre el tema:
“Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas?” (Jn 20, 15), y “Simón, hijo de Juan, ‘¿me amas?”, (Jn 21, 16).
Los Ejercicios Espirituales del Santo Padre y la Curia Romana terminarán
el viernes 11 de marzo. El predicador ofrecerá su meditación conclusiva sobre
la pregunta propuesta por el Evangelio de San Lucas: “María dijo al ángel:
¿Cómo sucederá esto?” (Lc, 1, 34).
(María Fernanda Bernasconi - RV).