Una vez que el Gobierno sirio se ha hecho con el control del este de Alepo, existe una seria preocupación por parte de todas las organizaciones humanitarias ante la grave situación en la que puedan encontrarse los 250.000 civiles que se estima que se han quedado en esa zona.
Fin inmediato del conflicto
La red internacional de Cáritas está habilitando fondos de emergencia para ofrecer ayuda a las personas que se encuentran atrapadas en Alepo. Además, insta a una finalización inmediata del conflicto, al tiempo que reclama que la ayuda humanitaria pueda llegar a quienes más la necesitan y que se proteja la vida de los civiles. Para Cáritas, este es el momento de dar paso a las negociaciones políticas que pongan fin a esta cruenta guerra.
"Todos estamos con la gente de Alepo", ha manifestado el Patriarca Gregory III Laham, líder espiritual de la Iglesia católica greco-melquita, al personal de Caritas en Siria. El Patriarca ha elogiado a las ONG y a las organizaciones voluntarias por el trabajo que realizan para "aliviar la tragedia y el sufrimiento de las personas". "Damos las gracias -ha asegurado-- a todos aquellos que están apoyando a Alepo desde fuera para que se ponga fin al sufrimiento y para que la paz sea devuelta a esta hermosa ciudad".
Por su parte, el presidente de Cáritas Siria y obispo de Alepo, monseñor Antoine Audo, ha enviado a todas las Cáritas del mundo un mensaje con motivo de la Navidad en la que pide "dejar de lado las armas y la ideología" y "contemplar los rostros afligidos de los que más sufren"
Este es el texto del mensaje:
"Con la cercanía de la Navidad, acerquémonos a Alepo, de este a oeste, como si avanzáramos hacia la gruta de Belén.Pongamos a un lado las armas y la ideología. Y contemplemos las caras afligidas, empezando por mujeres y niños, de los que más sufren y contemplemos también a los hombres, indignados y humillados, que han perdido sueños e ilusiones.Decidámonos a hablar en la verdad y que el hombre, creado a imagen de Dios, nos conduzca hacia una mayor objetividad.Cáritas Siria, a través de esta crisis, y sintiendo la experiencia de la universalidad de la Iglesia, y de la atención del mundo árabe y musulmán y de los cristianos de Oriente, no cesa de repetir: Juntos somos cristianos, y al lado de los musulmanes, todos somos ciudadanos.Como sirios y cristianos, animamos a nuestros socios a trabajar por la reconciliación del mundo musulmán, de sunitas y chiitas, entrando en diálogo honesto con el pensamiento contemporáneo.Esto es lo que conducirá a nuestras sociedades hacia una mayor dignidad y a hablar en la verdad.Que se detenga la explotación de las fragilidades y las debilidades del tercer mundo para favorecer intereses económicos y políticos.Escuchen la llamada de los más pobres, que es el grito de Dios crucificado y niño sin armas en el pesebre".
Protección y acogida de la red Cáritas a la población civil
Siria es una de las mayores emergencias a las que se enfrenta la red internacional de Caritas desde el estallido del conflicto, en marzo de 2011. Unos 13,5 millones de personas necesitan asistencia humanitaria en Siria; de ellos, al menos 6,5 millones son desplazados internos. Además, se estima que otros 4,6 millones de personas, la mitad de ellos niños y niñas, han buscado refugio en los países vecinos (Jordania, Líbano y Turquía, principalmente) o han buscado asilo, jugándose la vida a través de rutas de máximo riesgo, en Europa.
En este contexto, Cáritas trabaja en dos líneas principales: apoyo a las necesidades básicas de las familias vulnerables, a través de reparto de alimentos, pañales y leche para bebés, ayuda para vivienda y asistencia médica; y educación y apoyo psicosocial a menores desplazados a causa del conflicto.
Respuesta de Cáritas Española a desplazados y refugiados
La Confederación Cáritas Española ha estado desde el primer momento al lado de la población afectada por la guerra en Siria y de las Cáritas locales que acogen refugiados, tanto en la región de Medio Oriente como en los países de tránsito que están siendo el escenario del éxodo de ciudadanos sirios en la frontera este de Europa.
Junto al apoyo solidario que Cáritas Española viene prestando a las Cáritas de Jordania, Líbano y Turquía para proporcionar acogida a millones de refugiados sirios, a lo largo de 2016 ha liberado diversas partidas económicas para responder a las distintas llamadas de emergencia lanzadas por las Cáritas europeas para afrontar la llegada de refugiados a sus países, como son los casos de las Cáritas de Macedonia, Serbia, Croacia, Grecia, Eslovenia y Bulgaria.