El borrador final será
votado este sábado y después entregado al pontífice
"Ambos extremos van a quedar
muy decepcionados", sostiene Romilda Ferrauto, una de las portavoces
del sínodo, la víspera de la clausura el sábado en el Vaticano de la asamblea
de obispos de todo el mundo.
Durante tres semanas, unos 400
obispos y cardenales se reunieron ante la presencia del papa Francisco a
puerta cerrada en el Vaticano para debatir sobre los retos de la familia
moderna.
"No vamos a cambiar la
doctrina de la Iglesia", adelantaron en varias ocasiones los prelados que
asisten a la reunión.
Interrogados al margen de las
labores, la mayoría de ellos coincide en decir que no hay que
esperarse un "resultado sensacional" de la reunión.
Divididos sobre temas candentes que
afectan a la familia moderna, como la homosexualidad y el divorcio, los
llamados "padres sinodales" entregarán al papa un informe final con
las conclusiones, el cual deberá ser votado el sábado.
Según uno de los portavoces del
sínodo, es probable que el informe sea aprobado por la mayoría de la
asamblea, pero no se sabe si el papa lo hará público como ocurrió hace un año.
Al abrir las labores, Francisco
instó a los 270 obispos de todo el mundo presentes a oponerse a la "mentalidad
de la conspiración" al referirse indirectamente a la divulgación de
una carta firmada por 13 cardenales conservadores que lo criticaban por sus
posiciones a favor de las reformas.
El clima de conspiración se
agudizó este mes con la falsa noticia divulgada el miércoles por la prensa
italiana en la que se aseguraba que el papa tenía un tumor benigno en el
cerebro, una manera de desprestigiar sus palabras y sus gestos, ya que tendría
algo anómalo en la cabeza.
"El momento elegido revela
la intención manipuladora de la polvareda que se levantó",
comentó irritado el diario del Vaticano, l'Osservatore Romano.
Divididos por grupos
lingüísticos, los obispos han abordado algunos de los temas espinosos según su
propia visión.
Más de dos tercios de los Padres
Sinodales, se opone a la idea de otorgar la comunión a divorciados que se vuelven
a casar, según fuentes internas.
El grupo alemán que
asiste al sínodo, motor de la reunión por sus posiciones progresistas, propuso
una serie de criterios para lo que llaman el "discernimiento", es
decir la evaluación de cada caso según la propia conciencia, de manera de
permitir a algunos divorciados acceder a la comunión.
Una comisión especial se
encargará de seguir trabajando sobre el tema.
Este viernes el papa volvió a
abordar el tema de las reformas durante la misa que ofició en la
capilla de la Casa Santa Marta al animar a la Iglesia a "evaluar los
tiempos y cambiar con ellos, permaneciendo firmes en el Evangelio".
Un llamado a "no ser
conformistas" y a evitar "permanecer inmóviles" por
comodidad, dijo.
Pese al escándalo este mes por la 'salida
del armario' más clamorosa de la historia del Vaticano por parte de un
prelado y alto funcionario de la curia, el tema de la homosexualidad no fue
abordado.
Los obispos africanos se
niegan en bloque a abordar el asunto, ya que lo consideran un fenómeno de
las sociedades occidentales.
Buena parte de los prelados
crecieron y se formaron bajo la influencia del papa Juan Pablo II (1978-2005) y
consideran clave el documento "Familiaris consortio" de
1981, muy firme con la doctrina.
"La ley de hierro de
la Familiaris consortio pesó", lamentó a la AFP un obispo progresista.
"El sínodo no puede
concluirse teniendo como referencia un texto de hace 34 años como si
el mundo no hubiera cambiado", comentaron algunos obispos, según informó
Ferrauto.
El texto final insta a los
católicos a vivir el matrimonio como algo positivo y optimista e invita a acompañar
a las familias "heridas", las parejas separadas, las madres solteras,
etc.
Los obispos aprobaron también la
decisión de Francisco de simplificar los trámites para obtener la nulidad
del matrimonio. que algunos conservadores tildaron en su momento de divorcio
católico contrario al dogma.
Por otro lado El cardenal
canadiense Gerald Cyprien Lacroix ha destacado la "ternura"
que la Iglesia aplica en casi toda situación y respecto a todas las personas y
ha expresado que se va del Sínodo de Obispos de la Familia que concluye este
domingo "con mucha más esperanza" que cuando llegó
.
"La Iglesia tiene la
capacidad de ofrecer a las familias algo maravilloso", ha aseverado
durante el tradicional briefing informativo en el Vaticano sobre los
avances de la asamblea sinodal.
Lacroix ha detallado que su grupo
lingüístico uno de los 13 círculos menores en los que se subdividía a los
participantes del Sínodo ha pedido "que la preparación al matrimonio no
sea cerca de la fecha del matrimonio, sino una preparación catecumenal".
Además, ha precisado que "el trabajo sinodal no emana un texto
legislativo" sino que pretende"presentar al Papa una reflexión" para
que el pontífice ayude a seguir adelante.