viernes, 4 de agosto de 2017

4 de agosto: san Juan Bautista Vianney, Cura de Ars, presbítero



Nació en Dardilly el 8 de mayo de 1786. Por el lugar de ver la luz –un villorrio cercano a Lyon–, por la condición económico-social de la familia –unos destripaterrones a sueldo, cuando lo había–, por el comienzo de su vida en sociedad como pastor de tres cabras y un borrico y, finalmente, por lo torpón de cabeza cuando se puso a hacer pinitos en los estudios, bien parecía que habría de decir a la historia tan pocas cosas como la historia de él.
Pero no fue como se temía; las cosas cambiaron más de lo que ningún agorero pudiera predecir. Y eran tiempos turbios los de Francia aquellos. Estalló la Revolución Francesa cuando tenía poca edad Juan Bautista. Ni siquiera pudo hacer su Primera Comunión en la pequeña Iglesia de su pueblo porque ya había llegado el sacerdote constitucional –que era lo mismo que decir cismático– y tuvo que recibir al Señor por primera vez en un salón de un pueblo cercano con las ventanas cerradas a cal y canto para que el sacerdote disimulado y perseguido –pero fiel a Roma– no sufriera maltratos con sus fieles. Si a esto se añade que fue declarado prófugo y desertor del ejército cuando se le llamó a filas para combatir en España, teniendo que pasar escondido dos años por aquellos campos de Dios, que le despidieron del seminario por no mantener buenas relaciones con el latín y que tenía bastante poca salud, tendremos un cuadro bastante aproximado al que quiere expresar el paisano cuando dice de alguien que «parece que lo ha mirado un tuerto».
Sin embargo, su persona llegó a ser una especie de piedra de escándalo en Lyon –sede primada metropolitana de Francia– y en Belley primero; luego será todo el país galo el que hablará de él entre la perplejidad, la sorna y el consuelo; las mismas fronteras no pudieron impedir el hálito que salió de su pequeño enclave humano que ni siquiera tenía las condiciones necesarias para haber sido nombrado jurídicamente como parroquia. Casi por compasión le ordenó el obispo de Grenoble, monseñor Simón, el 13 de agosto de 1815, a petición del P. Balley, que intercedió tozudamente por él y se hizo cargo de completar su formación, teniéndolo varios años por vicario a su cuidado en Ecully, hasta que le encomendaron el cuidado pastoral de aquella aldehuela que se llamaba Ars, una especie de anejo de Mizérieux. Su labor allí le valió que el papa Pío XI lo declarara Patrono universal de los sacerdotes seculares, que es su mayor gloria. ¿Qué hizo? Pues casi nada. Aquel que parecía el epítome de la ineptitud y que, cuando se refería a sí mismo, solo se le ocurría decir que su «tentación era la desesperación» resulta que pasó una cuarentena de años –toda su vida de sacerdote– consagrando todas sus energías y afanes a la santificación de las personas de su minúsculo pueblo.
Fue un cura rural «todo terreno». Con sencillez visita casa por casa a los suyos, dedica atención especial a niños con catequesis y a los enfermos con tiempo y consuelos; cuida lo más que puede la dignidad en el culto, amplía y ennoblece el templo y presta ayuda a los curas vecinos. Vive con asombrosas penitencias y es intensísima la oración. «¡Ars ya no es Ars!» llegaron a decir los lugareños. ¡Claro! Se ocupó de la moralización del pueblo, declarando la guerra a las tabernas, peleando contra el trabajo en los domingos y acabando con el baile. Nada de esto fue fácil, pero supo unir a su talante bondadoso la rectitud y firmeza explicada muy sencillamente en las predicaciones. A medida que disminuyeron los vicios empezaron a salir las vocaciones.
Después comenzó la procesión de gente procedente primero de los pueblos vecinos que conocían al sencillo cura de Ars de cuando iba a ayudar a los compañeros próximos. Pero de lo local, se va saltando como en círculos concéntricos a niveles más amplios hasta que la riada de gente llegó a obligar a las taquillas a que despacharan billetes de ida y vuelta a Ars; ignorantes campesinos le consultaron sus problemas, pidieron consejo y recibieron por él el perdón de los pecados; pero también llegaron a Ars obispos, intelectuales y políticos.
¿El secreto? Cumplimiento fidelísimo de las obligaciones de su ministerio, dieciocho horas de confesión diaria, poca comida y escaso tiempo para el sueño en camastro de madera sin colchón donde poner sus huesos, penitencia más de espanto que de admiración para quienes le atienden cuando contemplan los efectos, refriegas con el Demonio, sencilla y clara predicación, mucha oración y aún le dio la vida para fundar La Providencia para atender a las niñas huérfanas pobres de los contornos.
Murió a las dos de la madrugada del día 4 de agosto de 1859. Era jueves. Fue declarado por el Papa Pío XI Patrono universal de los sacerdotes seculares
¡Qué bien vendrían a la Iglesia, en cada tiempo, párrocos atornillados a los confesonarios! El resto de sus menesteres se cumplirían mejor al rebufo del perdón.
Archimadrid.org

El Defensor del Pueblo pide mejorar las condiciones de los migrantes


El Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, ha trasladado a la Fiscalía General del Estado que hay 13 internos que afirman ser menores de edad en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche. Asimismo, reclama mejoras en la asistencia y acogida a las personas que llegan en patera
El Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán ha realizado esta semana una visita no anunciada al Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche ante la sospecha de que cuatro internos de Guinea, liberados el pasado 28 de julio, eran menores de edad. «Si son menores no tiene mucho sentido que estén en un centro de esta naturaleza», ha declarado Marugán a la agencia de noticias Europa Press. La ONU también ha pedido a España que aplique medidas cautelares de protección con otros cuatro posibles menores extranjeros a los que estaría tratando como adultos.
Por otro lado, durante la inspección del centro, el Defensor del Menor comprobó que conviven internos recién llegados a España en patera con otros extranjeros que han salido de prisión y que están a la espera de su expulsión, circunstancia que ya ha sido denunciada en numerosas ocasiones. «Hay una masa y una mezcla heterogénea, porque hay personas que vienen de las pateras, hay gente que tiene alguna sanción administrativa y en algunos casos algún tipo de delito de menor entidad» ha asegurado Marugán, que también ha subrayado que estas personas tienen que convivir «intensamente» durante 60 días en unas instalaciones que «no son las más adecuadas».
Además, la institución ha advertido de que «falta asistencia sanitaria permanente» y que hay «carencias» en la asistencia social que, en su opinión, debería ser asumida por personal especializado ajeno a la policía.
Mejoras en la asistencia y acogida a las personas que llegan en patera
Marugán también ha pedido esta semana que se mejore la asistencia y acogida a las personas que llegan en situación irregular a las costas españolas. Para el Defensor del Pueblo, la asistencia jurídica ha sido siempre un elemento fundamental para el ejercicio efectivo de sus derechos más básicos, por eso considera «necesario que los Colegios de Abogados velen por la calidad del servicio que prestan los letrados adscritos al turno de oficio de extranjería». Así, «aboga por una formación especializada en esta materia que les permita detectar personas especialmente vulnerables como menores, víctimas de trata o solicitantes de asilo».
Por otra parte, en 2016, el Defensor del Pueblo recomendó la elaboración de un protocolo de actuación para los supervivientes de naufragios que incluyera asistencia psicológica especializada ya que considera que debe prevalecer la condición de víctimas de estas personas.  Para la Institución «las dependencias policiales o los centros de internamiento de extranjeros en los permanecen largo tiempo no reúnen las condiciones adecuadas para recibir una atención que mejore su situación psicológica». El Ministerio del Interior rechazó esta recomendación.
El Defensor del Pueblo recuerda «la importancia de dar prioridad a la atención de mujeres embarazadas y menores».Además solicitó que mujeres embarazadas, niños y niñas sean alojados en centros de protección social públicos o de entidades como Cruz Roja, evitando su privación de libertad.
Condiciones inadecuadas en Barajas
Marugán también ha realizado una visita no anunciada a la sala de asilo del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas y ha alertado de que la capacidad de estas dependencias «no son las adecuadas» para el número de personas que albergan y que la comida «tampoco es la adecuada» a la vista del tiempo que se prolonga la privación de libertad, tal y como recoge Europa Press.
La institución también ha denunciado que las condiciones de la sala son «especialmente gravosas» para menores, mujeres embarazadas y personas enfermas, y considera que el protocolo que se sigue para la identificación y traslado de los menores extranjeros no acompañados ha de ser revisado y se debe mejorar la coordinación con la Fiscalía General del Estado.
Alfa y Omega

El Papa pide al Gobierno venezolano que la Constituyente «se suspenda»


La Secretaria de Estado del Vaticano ha emitido un comunicado en el que el Papa Francisco pide a todos los actores políticos, y en particular al Gobierno venezolano «que se asegure el pleno respeto de los derechos humanos y de las libertades fundamentales, como también de la vigente Constitución; se eviten o se suspendan las iniciativas en curso como la nueva Constituyente que, más que favorecer la reconciliación y la paz, fomentan un clima de tensión y enfrentamiento e hipotecan el futuro»
La Santa Sede, en un comunicado emitido este viernes, «manifiesta nuevamente su profunda preocupación por la radicalización y el agravamiento de la crisis en la República Bolivariana de Venezuela, por el aumento de los muertos, de los heridos y de los detenidos». El Santo Padre, directamente y a través de la Secretaría de Estado, «sigue de cerca dicha situación y sus implicaciones humanitarias, sociales, políticas, económicas e incluso espirituales, asimismo asegura su constante oración por el país y por todos los venezolanos, mientras invita a los fieles de todo el mundo a rezar intensamente por esta intención»
Al mismo tiempo, la Santa Sede pide a todos los actores políticos, y en particular al Gobierno, «que se asegure el pleno respeto de los derechos humanos y de las libertades fundamentales, como también de la vigente Constitución; se eviten o se suspendan las iniciativas en curso como la nueva Constituyente que, más que favorecer la reconciliación y la paz, fomentan un clima de tensión y enfrentamiento e hipotecan el futuro»; y también pide que «se creen las condiciones para una solución negociada de acuerdo con las indicaciones expresadas en la carta de la Secretaría de Estado del 1 de diciembre de 2016, teniendo en cuenta el grave sufrimiento del pueblo a causa de las dificultades para obtener alimentos y medicamentos, y por la falta de seguridad»
La Santa Sede dirige, finalmente, un «apremiante llamamiento a toda la sociedad para que sea evitada toda forma de violencia, invitando, en particular, a las Fuerzas de seguridad a abstenerse del uso excesivo y desproporcionado de la fuerza».
Alfa y Omega

COMENTARIO AL EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO (13,54-58) POR BENEDICTO XVI:



Queridos hermanos y hermanas:

En el Evangelio de hoy nos hallamos todavía en la sinagoga de Nazaret, el lugar donde Jesús creció y donde todos le conocen, a Él y a su familia. Después de un período de ausencia, ha regresado de un modo nuevo: durante la liturgia del sábado lee una profecía de Isaías sobre el Mesías y anuncia su cumplimiento, dando a entender que esa palabra se refiere a Él, que Isaías hablaba de Él. 

Este hecho provoca el desconcierto de los nazarenos: por un lado, «todos le expresaban su aprobación y se admiraban de las palabras de gracia que salían de su boca» (Lc 4, 22); san Marcos refiere que muchos decían: «¿De dónde saca todo eso? ¿Qué sabiduría es esa que le ha sido dada?» (6, 2); pero por otro lado sus conciudadanos le conocen demasiado bien: Es uno como nosotros —dicen—. Su pretensión no podía ser más que una presunción. «¿No es éste el hijo de José?» (Lc 4, 22), que es como decir: un carpintero de Nazaret, ¿qué aspiraciones puede tener?

Conociendo justamente esta cerrazón, que confirma el proverbio «ningún profeta es bien recibido en su tierra», Jesús dirige a la gente, en la sinagoga, palabras que suenan como una provocación. 

Cita dos milagros realizados por los grandes profetas Elías y Eliseo en ayuda de no israelitas, para demostrar que a veces hay más fe fuera de Israel. 

En ese momento la reacción es unánime: todos se levantan y le echan fuera, y hasta intentan despeñarle; pero Él, con calma soberana, pasa entre la gente enfurecida y se aleja. 

Entonces es espontáneo que nos preguntemos: ¿cómo es que Jesús quiso provocar esta ruptura? Al principio la gente se admiraba de Él, y tal vez habría podido lograr cierto consenso... Pero esa es precisamente la cuestión: Jesús no ha venido para buscar la aprobación de los hombres, sino —como dirá al final a Pilato— para «dar testimonio de la verdad» (Jn 18, 37). 

El verdadero profeta no obedece a nadie más que a Dios y se pone al servicio de la verdad, dispuesto a pagarlo en persona. Es verdad que Jesús es el profeta del amor, pero el amor tiene su verdad. Es más, amor y verdad son dos nombres de la misma realidad, dos nombres de Dios. 

Recordamos estas palabras de san Pablo: «El amor... no presume, no se engríe; no es indecoroso ni egoísta; no se irrita; no lleva cuentas del mal; no se alegra de la injusticia, sino que goza con la verdad» (1 Co 13, 4-6). 

Creer en Dios significa renunciar a los propios prejuicios y acoger el Rostro concreto en quien Él se ha revelado: el hombre Jesús de Nazaret. Y este camino conduce también a reconocerle y a servirle en los demás.

En esto es iluminadora la actitud de María. ¿Quién tuvo más familiaridad que ella con la humanidad de Jesús? Pero nunca se escandalizó como sus conciudadanos de Nazaret. Ella guardaba el misterio en su corazón y supo acogerlo cada vez más y cada vez de nuevo, en el camino de la fe, hasta la noche de la Cruz y la luz plena de la Resurrección. 
Que María nos ayude también a nosotros a recorrer con fidelidad y alegría este camino.

(Benedicto XVI, Ángelus del 3 de febrero de 2013)

EVANGELIO DE HOY: UN PROFETA ES DESPRECIADO EN SU PATRIA




Lectura del santo Evangelio según san Mateo (13,54-58):

En aquel tiempo, Jesús llegó a su tierra y se puso a enseñar a la gente en la sinagoga, de tal forma, que todos estaban asombrados y se preguntaban: 

«¿De dónde ha sacado éste esa sabiduría y esos poderes milagrosos? ¿No es el hijo del carpintero? ¿No es María su madre, y no son sus hermanos Santiago, José, Simón y Judas? ¿No viven entre nosotros todas sus hermanas? ¿De dónde, pues, ha sacado todas estas cosas?»

Y se negaban a creer en Él.

Entonces Jesús les dijo: «Un profeta no es despreciado más que en su patria y en su casa».

Y no hizo muchos milagros allí por la incredulidad de ellos.

Palabra del Señor

PAPA FRANCISCO Y LA SANTA SEDE SOBRE VENEZUELA: EL GOBIERNO DEBE RESPETAR LOS DERECHOS HUMANOS Y LAS LIBERTADES FUNDAMENTALES




Queridos amigos, la Santa Sede ha publicado hoy un comunicado oficial en el que manifiesta la preocupación del Papa Francisco por la grave situación que se vive en Venezuela; y pide que se asegure el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales; se remedie el sufrimiento del pueblo a causa de la falta de alimentos y medicinas; y se evite toda violencia, especialmente por parte de las fuerzas de seguridad. 

Respecto a la nueva Constituyente “más que favorecer la reconciliación y la paz, fomenta un clima de tensión y enfrentamiento”, por lo que la Santa Sede pide que se suspenda esta iniciativa.

Este es el texto completo del comunicado: 

«La Santa Sede manifiesta nuevamente su profunda preocupación por la radicalización y el agravamiento de la crisis en la República Bolivariana de Venezuela, por el aumento de los muertos, de los heridos y de los detenidos. 

El Santo Padre, directamente y a través de la Secretaría de Estado, sigue de cerca dicha situación y sus implicaciones humanitarias, sociales, políticas, económicas e incluso espirituales. Asimismo, asegura su constante oración por el País y por todos los venezolanos, mientras invita a los fieles de todo el mundo a rezar intensamente por esta intención.

Al mismo tiempo, la Santa Sede pide a todos los actores políticos, y en particular al Gobierno, que se asegure el pleno respeto de los derechos humanos y de las libertades fundamentales, como también de la vigente Constitución; se eviten o se suspendan las iniciativas en curso como la nueva Constituyente que, más que favorecer la reconciliación y la paz, fomentan un clima de tensión y enfrentamiento e hipotecan el futuro; se creen las condiciones para una solución negociada de acuerdo con las indicaciones expresadas en la carta de la Secretaría de Estado del 1 de diciembre de 2016, teniendo en cuenta el grave sufrimiento del pueblo a causa de las dificultades para obtener alimentos y medicamentos, y por la falta de seguridad.

La Santa Sede dirige, finalmente, un apremiante llamamiento a toda la sociedad para que sea evitada toda forma de violencia, invitando, en particular, a las Fuerzas de seguridad a abstenerse del uso excesivo y desproporcionado de la fuerza».