De partida tenemos que decir que Dios es el Otro, que nos trasciende
totalmente, y por tanto de El, desde nosotros mismos, poco podemos saber, y de
lo poco que sabemos, sabemos poco.
Por tanto, nuestra vía para conocerlo va por otro camino: Jesús de Nazaret.
El, con los hemos y palabras de su vida, nos ha descubierto quién es y debe ser
Dios para nosotros. Es un tema muy amplio. Señalaremos solo unas líneas
vertebrales, yendo más allá de la exacta literalidad histórica de las palabras
para buscar su mensaje, que es lo importante; cada uno podemos sacar
conclusiones bien concretas, correspondientes a la realidad de nuestro tiempo,
para nosotros mismos y para el mundo en que vivimos, confrontando el Evangelio
con la realidad de la vida, como un espejo que va reflejando en si mismo todo
aquello por donde pasa, pues el Evangelio, donde quiera que sea, siempre tiene
algo que decir, y por más veces que lo leas siempre descubres algo nuevo. Es
así de maravilloso, porque maravilloso fue aquel gran Jesús de Nazaret que le
dio origen.
1.- Creo en el Dios de Jesús que responde con hechos de liberación a los
problemas, necesidades y sufrimientos de los hombres de su tiempo como debemos
responder nosotros hoy a los de nuestro tiempo.
2.-Creo en el Dios de Jesús, que se enfrentó a las causas y a los
causantes de la opresión político-religiosa de las gentes de su tiempo.
3.-Creo en el Dios de Jesús, cuya Religión es una Religión de Liberación
contra toda opresión.
4.-Creo en el Dios de Jesús que tiene hambre y sed de justicia para este
mundo, que nos pide que tengamos todos.
5.-Creo en el Dios de Jesús que tiene opción preferencial por los
primidos y empobrecidos, que nos pide que tengamos todos, porque solo desde
ellos es posible que sea nuestro el Reino de Dios.
6.-Creo en el Dios de Jesús que denuncia a los ricos y su riqueza para
que se desprendan de ella y así formen parte del Reino de Dios.
7.-Creo en el Dios de Jesús que presenta a Dios incompatible con el
dinero.
8.-Creo en el Dios de Jesús que rechaza el poder como dominio de los
demás.
9.-Creo en el Dios de Jesús que define la autoridad como servicio total.
10.-Creo en el Dios de Jesús de la misericordia y el perdón porque todos
somos ontologicamente imperfectos.
11.-Creo en el Dios de Jesús que no juzga, no condena, perdona, da
generosamente.
12.-Creo en el Dios de Jesús que quiere la vida en plenitud para todos y
para todo.
13.-Creo en el Dios de Jesús que está realmente presente en este mundo.
14.-Creo en el Dios de Jesús en las celebraciones de la Eucaristía
cuando hay en ellas un compromiso real y liberador con los oprimidos del mundo.
15.-Creo en el Dios de Jesús que es Padre/Madre de igualdad y
fraternidad universal.
16.-Creo en el Dios de Jesús que es plenitud definitiva para todos y
para todo.
17.-Creo en el Dios de Jesús para quien la vida no tiene fin.
18.-Creo en el Dios de Jesús para el cual morir es celebrar la vida, no
la muerte.
19.-Creo en el Dios de Jesús para el cual el perdón de Dios pasa siempre
a través del perdón a los demás.
20.-Creo en el Dios de Jesús que está en el pueblo, comprometido con el
pueblo.
21.-Creo en el Dios humano de Jesús.
22.-Creo en el Dios de Jesús que está siempre presente donde hay alguien
haciendo el bien.
23.-Creo en el Dios de Jesús que denunció la falsedad, la inmoralidad,
la corrupción, la avaricia, la hipocresía, de los fariseos, de los
legisladores, de los jueces, de los senadores y sumos sacerdotes de su tiempo.
24.-Credo en el Dios de Jesús que no va a la muerte a ciegas, que sabe
bien lo que hace y lo que le espera, que sabe que seguirá vivo personalmente y
en sus discípulos, que tiene conciencia muy crítica, política e histórica de
realidad de su vida.
Fuente: Religión digital