Francisco,
durante una misa en Santa Marta
El
Papa advierte contra los "adoradores de sí mismos", que hacen mucho
mal a la Iglesia
Redacción, 03 de junio de 2013 a las 13:02
El papa
Francisco afirmó hoy que los corruptos son "el anticristo", hacen
mucho daño a la Iglesia y son "un peligro, ya que son adoradores de sí
mismos, sólo piensan en ellos y consideran que no necesitan de Dios".
El
pontífice hizo estas manifestaciones durante la misa que celebró en la capilla
de la residencia de Santa Marta, donde se aloja, en la que se refirió a la parábola de los labradores
malvados, del Evangelio de Mateo y a los tres modelos de cristianos
en la Iglesia: los pecadores, los corruptos y los santos.
Francisco señaló que de los pecadores no es necesario hablar
demasiado, "ya que todos los somos, nos conocemos desde dentro y sabemos
que cosa es un pecador y si alguno de nosotros no se siente así, que vaya a la
consulta de un médico espiritual".
El Obispo
de Roma añadió que la parábola habla de otra figura, la de aquellos que quieren adueñarse
de la viña y han roto relaciones con el dueño de la misma, "un
patrón (Dios) que nos ha llamado con amor, nos custodia y nos da libertad, pero
esas personas se sienten fuertes y autónomas de Dios".
"Esas
personas, poco a poco han roto esa relación con Dios y dicen: 'nosotros no
necesitamos a ese patrón, que no venga a molestarnos". Esos son los
corruptos, aquellos que eran pecadores como todos nosotros, pero han dado un
paso adelante,se han consolidado en el pecado", aseguró
Francisco.
El papa
Bergoglio agregó que los corruptos "son un peligro también para los
cristianos, ya que sólo piensan en ellos", en su grupo.
El
pontífice advirtió que Judas, "de pecador avaro acabó en la
corrupción" y subrayó que los corruptos "son grandes desmemoriados,
han olvidado el amor con el que Dios ha creado su viña, y se han convertido en adoradores
de sí mismos".
"¡Cuanto
mal hacen los corruptos en la comunidad cristiana, que el Señor nos libere de caer
en ese camino de la corrupción", agregó el papa, que recordó al
apóstol Juan que decía que los corruptos "son el anticristo, están en
medio de nosotros, pero no son de los nuestros".
Francisco
agregó que, al contrario que los corruptos, los santos hacen "mucho
bien a la Iglesia", son
los que "obedecen al Señor, los que le adoran y no han perdido la memoria
del amor con el que el Señor ha creado su viña".
El papa argentino imploró a Dios la gracia "de no convertirnos en
corruptos".
"Pecadores sí, corruptos
no", subrayó Francisco, que recordó que
hoy se cumplen 50 años de la muerte del beato papa Juan XXIII (25 de noviembre
1881-3 de junio de 1963), al que puso como "modelo de santidad".
Francisco rezará hoy ante la tumba del "Papa bueno", como era
conocido Juan XXIII, en la basílica de san Pedro del Vaticano.
El italiano Angelo Roncalli fue elegido papa el 28 de octubre de
1958. En su corto pontificado convocó el Concilio Ecuménico Vaticano II, que
cambió la Iglesia y la lanzó al tercer milenio. Fue beatificado por Juan Pablo
II el 3 de septiembre de 2000, durante el año jubilar de la Iglesia católica.