Del Salmo 30:
A tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu
Sé la roca de mi refugio,
un baluarte donde me salve,
tú que eres mi roca y mi baluarte;
por tu Nombre dirígeme y guíame.
A tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu
Sé la roca de mi refugio,
un baluarte donde me salve,
tú que eres mi roca y mi baluarte;
por tu Nombre dirígeme y guíame.
A tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu
A tus
manos encomiendo mi espíritu:
Tú, el Dios leal, me librarás;
yo confío en el Señor.
Tu misericordia sea mi gozo y mi alegría.
Tú, el Dios leal, me librarás;
yo confío en el Señor.
Tu misericordia sea mi gozo y mi alegría.
A tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu
Haz brillar tu Rostro sobre tu siervo,
sálvame por tu misericordia.
En el asilo de tu presencia los escondes
de las conjuras humanas.
Haz brillar tu Rostro sobre tu siervo,
sálvame por tu misericordia.
En el asilo de tu presencia los escondes
de las conjuras humanas.
A tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu
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