De la misma forma, cuando nos ofenden o nos hacen daño debemos perdonar. El no perdonar además de separarnos de otras personas también nos separa de Dios.
Nosotros también ofendemos al Señor de muchas formas y tenemos la necesidad de recibir Su Perdón.
Jesús durante su vida en la tierra, perdonó muchos pecados, curaba a los enfermos y sobre todo perdonaba sus pecados.
Sabemos que cuando nos arrepentimos somos completamente perdonados porque Jesucristo pagó por nuestros pecados cuando Él murió en la cruz.
Y no solamente eso, también bajó al limbo a rescatar a nuestros primeros padres Adán y Eva y a todos los inocentes que habían muerto antes de venir Él al mundo.
Por todo esto te pedimos , Señor, que nos ayudes a no ofenderte; y si lo hacemos que nos des tú Perdón.
Sé que tu perdón es tan grande,
que no tomas en cuenta nuestras bajezas
y nuestras vergüenzas.
Por nuestros pecados
cada herida de tu cuerpo la abrimos sin clemencia
y cada espina clavada en tu frente,
tu amor humillamos.
Perdónanos Dios mío.
MEMM
Os dejo una frase de la Madre Teresa de Calcuta que a mi me ha hecho pensar en si damos lo mismo que pedimos,en si vemos con los mismos ojos nuestras faltas que las de los demas: " Nosotros predicamos un Dios bueno,comprensivo,generoso y compasivo.Pero ¿lo predicamos también a través de nuestras actitudes?Si queremos ser coherentes con lo que decimos,todos deben poder ver esa bondad,ese perdón y esa comprensión en nosotros"
ResponderEliminarDificil "tarea" la que nos pone la Madre Teresa: "ser coherentes".