lunes, 22 de febrero de 2010

Cuaresma. Tentaciones


En la homilía de ayer el sacerdote nos habló de las tentaciones de Jesús.

Jesús fue tentado aunque es hijo de Dios, quiso ser tentado para acercarse más a nosotros. Él salió victorioso, ¿y nosotros?.


Debemos rezar mucho y leer el Evangelio con mucha atención, para fijarnos con detalle como reacciona Jesús en cada ocasión y parecernos cada vez más a Él. Tenemos que estar siempre alerta, ya que a veces el maligno nos tienta con situaciones que "aparentemente no son malas".


Recemos para tener siempre la ayuda del Espíritu Santo.

H. de Carmen

viernes, 19 de febrero de 2010

Escuchamos a San Lucas


En el evangelio del día 18 de febrero, San Lucas nos dice:

"Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? Respondió Pedro: ---Tú eres el Mesías de Dios.Él les ordenó que no se lo dijeran a nadie.Y añadió: ---Este Hombre tiene que padecer mucho, ser rechazado por los senadores, sumos sacerdotes y letrados, tiene que ser condenado a muerte y resucitar al tercer día.Y a todos les decía: ---Quien quiera seguirme, niéguese a sí mismo, cargue con su cruz cada día y sígame.Quien quiera salvar su vida la perderá; pero quien pierda su vida por mí la salvará.¿Qué le aprovecha al hombre ganar el mundo entero si se pierde o se malogra él?"
Nuestra cruz no es una enfermedad (aunque puede llegar a serlo) ni una contrariedad. Nuestra cruz es todo lo que nos aparta del Señor.
Señor, ayúdanos a que esta cuarersma veamos cual es nuestra cruz, nos neguemos a nosotros mismos, carguemos nuestra cruz y te sigamos.
MEMM

lunes, 8 de febrero de 2010

Conócete, acéptate, supérate

Un amig@ nos ha dejado en comentarios una cita de San Agustín para que reflexionemos, y qué cita: "Conócete, acéptate, supérate".

Para concernos de verdad, necesitamos llegar hasta lo más recóndito de nuestra alma y nuestro corazón, debemos ir quitando todas las capas que utilizamos para protegernos de los demás y de nosotros mismos. Solo lo lograremos con la ayuda de Dios, no teniendo miedo de lo que nos vayamos a encontrar.

Una vez que nos hemos conocido un poco más, debemos aceptarnos como somos, si Dios nos quiere con nuestras virtudes y nuestros defectos, ¿por qué nos es tan dificil a nosotros aceptarnos?, ¿por qué intentamos engañarnos a nosotros mismos?, ¿por qué nos da tanto miedo mirar en nuestro interior?.

Solo si nos conocemos y nos aceptamos podremos superarnos y conseguir acercarnos un poquito más a nuestro Señor.

MEMM